
Anoche el fallo del último Nadal. No da uno crédito: Maruja Torres. Todos los respetos para ella, pero no para su "literatura". Estatuilla en mano, perorando largo y tendido de "mi Terenci" y "mi Manolo" en alusión a Moix y a Vázquez Montalbán, personajes fantasmales, al parecer, de su novela. Afortunadamente existen buenos antídotos, estos sí, literarios: acabo de terminar "Chesil Beach", de Ian McEwan. Una vez más, asombroso y sobrehumano, como en "Expiación" o "Sábado" o "En las nubes"... Se comprende por qué ha sido elegido mejor libro del año 2008 en Babelia/ El País. Se comprende por qué es para muchos críticos el mejor escritor vivo en lengua inglesa. Ojalá se nos pegara algo de su prodigiosa manera de escribir.